FEIJÓO PROMETE RECUPERAR EL PP

Ojalá se cumplan los sensatos y equilibrados deseos que Cruz Varela manifiesta en la carta que hoy dirige al nuevo presidente del Partido Popular. Si de algo puede presumir Feijóo es de haber logrado cuatro mayorías absolutas en Galicia y haber demostrado su capacidad de buen y eficaz gestor en las distintas funciones que ha desempeñado a lo largo de su vida pública.

No obstante, la experiencia nos enseña que en la acción política nacional de España no sólo es suficiente la buena gestión económica que también pudieron desarrollar tanto Aznar como Rajoy de sus respectivas herencias recibidas, algo que la sociedad percibe como normal que unos paguen las facturas de las fiestas de otros y enmienden sus errores.

Si Feijóo llegara a olvidarse del mundo de las ideas y de los valores que su partido dice defender y de la pugna cultural en la que la izquierda lleva años de ventaja y cuenta con mayores medios de propaganda, o no llega a la presidencia del gobierno o su duración será breve. El tiempo nos lo dirá.

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FEIJÓO PROMETE RECUPERAR EL PP

 (De mi puño y tekla)

Sr. Feijoo:

Si su intención consiste en gobernar, se sobreentiende que cumplirá con sus obligaciones. Su antecesor, Casado, lo tiene muy claro apartándose y dejando su escaño en el Congreso, de ahí que se le dedicase una fría despedida. Se presentó Alberto Núñez Feijóo en el Congreso de Sevilla, entre gritos de "Presidente", con la promesa de recuperar el PP de las mayorías absolutas de Rajoy y Aznar. Y para ello comenzó a desgranar su equipo de Génova.

Tras elegir a Cuca Gamarra como nueva Secretaria General del Partido, se sitúan Feijóo del eje de Galicia y Elías Bendodo, hombre fuerte del PP andaluz, como coordinador en un Comité Ejecutivo con un claro perfil marianista. Por otra parte, al dejar Pablo Casado su escaño y abandonar la política rechazando el ofrecimiento de Feijóo de seguir vinculado al PP facilita la renovación sin lastre del pasado.

Cuando vemos que la cúpula no nos ampara, se produce una reacción traumática. El nuevo presidente debe ser consciente para dirigir el PP, que la concepción que él tenga del partido tiene que ser compartida y seguida por sus cargos orgánicos y por los barones autonómicos. No puede funcionar de otra manera. Así es como él mismo se ha granjeado en Galicia cuatro mayorías absolutas: confeccionando un equipo coordinado a su medida, repartiendo el poder territorial con equilibrio y dejando margen de maniobra, pero delimitando las líneas maestras de actuación. En este sentido, el nombramiento de la cúpula nacional anticipada ayer, debe entenderse como una guía de las estructuras, los equilibrios de poder y las prioridades de este PP, adulto en las maneras, moderado en el contenido y firme en sus políticas. Es un equipo sólido para un liderazgo fuerte.

El elemento organizativo más visible es la conformación del eje Galicia-Andalucía como pilar de Génova. Es una muestra de complicidad y del entendimiento que tiene Feijóo con Juan Manuel Moreno Bonilla y también una apuesta de Feijoo para rodearse de un equipo sólido y con experiencia de gestión. Ya conocíamos que Elias Bendodo sería su número tres,  dada  la continuidad que supone Cuca Gamarra y ayer supimos que Juan Bravo estará al frente de la Economía quien era hasta ahora responsable de Hacienda de la Junta. Ese nombramiento ejemplifica al modelo de éxito económico que defiende Feijoo frente a la deriva del Gobierno de Sánchez al haber ha sacado a Andalucía del marasmo socialista, mejorando exponencialmente su coyuntura con una política de reducción de impuestos y trabas burocráticas y ello, a través de unos impuestos responsables y una lucha contra el déficit.

El resto del núcleo duro se compone de pesos pesados de la Xunta y no se olvida de las cuotas autonómicas. AI PP de Madrid, por ejemplo, lo pone al mando del poder regional, cuya idea se encarga de definir en el Congreso. España no es una confederación ni el PP una formación federal, sino que entiende el país como unido y diverso a la vez, un estado de las Autonomías que respeta la Constitución.

Feijoo, en fin, se ha rodeado de un equipo que casa con su proyecto de partido. Sabe que, en contraposición a Sánchez, es un acierto mostrarse ante la opinión pública como un nuevo valor seguro de la gestión, pero no puede caer en el error Rajoy de fiarlo todo. Desde el centro derecha debe abanderar la regeneración política española, cuyo deterioro institucional es evidente.

Atentamente.  

José-Tomás Cruz Varela

Ex Director de RR.HH. Málaga.